jueves, 15 de octubre de 2015

UN LUMINOSO ESTABLO REFORMADO

Hace unos años se tenía la idea de que los establos y graneros eran los peores edificios de una casa de campo, puesto que en ellas se almacenaban los trastos, el alimento y los animales, los aperos de labranza o incluso las cosechas.
Pero en la actualidad, nada más lejos de esa concepción. Tener la fortuna de disponer de un establo, cuadra o granero con tejados a dos vertientes es un lujo. La reforma realizada en éste es la constatación a esa suerte. 
El espacio se ha abierto totalmente dejando una estancia diáfana en la que únicamente se ha cerrado la zona más íntima del baño y del dormitorio, detrás de la alacena hecha a medida.
El uso íntegro del blanco en toda la estancia salpicado con elementos en colores tostados neutros como el sofá, los puf y la magnífica alfombra de piel de vaca, único testimonio de lo que antes fue este espacio, desvelan un ambiente tranquilo y acogedor. El resto de muebles es de una livianidad total: los taburetes de la barra, la mesa de cristal y la pequeña silla de brazos de la esquina, junto a la chimenea no impactan visualmente para rellenar el ambiente, todo lo contrario.
Una magnífica colección de objetos étnicos y el maravilloso arreglo floral de lirios en un jarrón transparente completan este proyecto decorativo de gran belleza.

Via: Houzz

2 comentarios:

  1. Sabiendo por experiencia que esas alfombras son enormes y al comprobar que hay varias juntas delimitando el espacio del sofá, puedo hacerme una ligera idea de las enormes dimensiones de esa estancia tan acogedora y luminosa.

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  2. A mí personalmente me encanta. Creo que son muy acogedoras. Gracias por comentar, Carmela.

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