El título de mi post de hoy es un refrán que utilizamos mucho en Catalunya cuando queremos expresar que en los lugares pequeños, en las personas bajitas o en lo minúsculo muchas veces está la mejor esencia. Su traducción literal es "en el bote pequeño está la buena confitura". Creo que hoy va como anillo al dedo para demostrar que no son necesarios espacios grandes para crear belleza.
Cuando se vive en apartamentos o pisos surgen siempre dificultades de espacio, puesto que las limitaciones urbanísticas, el precio de los pisos y la concentración urbana no favorecen que éstos sean de grandes dimensiones ni que los que las tengan puedan estar al alcance de cualquier persona.
Así que, casi siempre, toca realizar tus sueños bajo la limitación de las dimensiones de la estancia. Pero si pensáis que en un apartamento pequeño no se pueden realizar proyectos decorativos impresionantes, os dejo como muestra esta cocina de hoy.
Personalmente me parece encantadora, práctica, limpia y luminosa. El equipo decorativo ha sabido sacar provecho de cada rincón y darle además una belleza especial.
Los muebles hasta el techo, recogiendo hasta el mínimo espacio, armarios rinconeros que llegan hasta el fondo de la pared, una encimera amplia y sin obstáculos, todo está al servicio de la practicidad. Si os fijáis bien tiene incluso lavavajillas!!!
Tres elementos que me parecen preciosos: el suelo de mosaico hidráulico, la ventana que le confiere esa espectacular luminosidad y el panel de pizarra que oculta el frigorífico... Genial!!!
Sin olvidar el arreglo floral de olorosos narcisos colocados en un macetero de mimbre... qué detalle....
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Via: El Mueble |